
El presidente estadounidense, Joe Biden, anunció una investigación independiente sobre el frustrado atentado contra Donald Trump y llamó a la unidad del país. También afirmó que se revisará todo el sistema de custodia.
“No hay lugar para este tipo de violencia y para ningún tipo de violencia en el país. Debemos unirnos como Nación”, afirmó.
Además, señaló que habló con Donald Trump. “Me alegro de que esté bien. Tuvimos una conversación corta pero buena. También extendemos nuestras condolencias a la persona que murió. Era un padre y estaba protegiendo a su familia. También pedimos una recuperación de los heridos”, dijo.
En un breve discurso en la Casa Blanca, Biden pidió una investigación “profunda y rápida” de ataque contra Trump y no hacer suposiciones sobre el motivo. También definió el ataque a tiros contra su rival republicano como un “intento de magnicidio” y prometió una revisión de la seguridad del candidato y la convención republicana que comienza el lunes.
Quién era Thomas Matthew Crooks, el joven que intentó asesinar a Donald Trump
El FBI identificó a Thomas Matthew Crooks, un joven de 20 años originario de Bethel Park, Pensilvania, como el tirador involucrado en el intento de asesinato del ex presidente Donald Trump.
Crooks logró disparar desde el techo de una planta de manufactura ubicada al norte del recinto Butler Farm Show, donde se llevaba a cabo el evento.
El medio local de Pittsburgh WTAE aseguró que usó un fusil tipo AR-15 y disparó ocho tiros antes de ser abatido por los agentes del servicio secreto. Crooks dejó una víctima mortal y dos heridos graves entre el público asistente, todos hombres adultos.
De acuerdo con documentación electoral, Crooks estaba registrado como votante republicano en Pensilvania. Sin embargo, registros federales de financiamiento de campañas muestran que realizó una donación de 15 dólares a un comité de acción política progresista el mismo día que el presidente Joe Biden asumió el cargo el 20 de enero de 2021.
La BBC confirmó que según los registros judiciales públicos de Pensilvania, el agresor no tenía antecedentes penales.