Antes de su paso por la península, el huracán Milton generó 36 tornados que ocasionaron más daño que el propio fenómeno mayor.
Milton tocó tierra con vientos de hasta 295 km/h y a medida que avanzó sobre la península de Florida, fue descendiendo en su intensidad hasta llegar a ser de categoría 1, casi una tormenta tropical.
Sin embargo, Estados Unidos contabiliza al menos 10 muertos y cientos de miles de evacuados y más de 3,5 millones de personas privados de sus servicios básicos de luz, y agua.
Los equipos de rescate continúan buscando víctimas entre los escombros y las autoridades hacen un balance de los estragos que ha dejado la tormenta, que ha causado inundaciones y arrancado árboles, postes eléctricos y tejados.
“La reconstrucción total va a llevar mucho tiempo”, reconoció el presidente Joe Biden. “Harán falta varios miles de millones de dólares”. Con Milton ya en el Atlántico, después de atravesar el Estado de costa a costa, las condiciones meteorológicas han empezado a mejorar, dando paso a un cielo azul y rayos de sol. El sistema se fue debilitando tras tocar tierra al sur de Tampa, a las 21.30 (hora de Argentina) con categoría 3 hasta convertirse en un ciclón post-tropical.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, informó que la Administración Biden-Harris desplegó 1.000 efectivos de búsqueda y rescate en Florida, así como equipos de guardacostas para ayudar en las labores de salvamento. Asimismo, 20 millones de raciones de comidas y 40 millones de litros de agua están siendo distribuidos entre los afectados por el paso del huracán Milton.