Se trata de un accidente vial ocurrido el jueves 2 de enero a las 7.15 de la mañana en la intersección de calles Caseros y Mitre de la ciudad de General Alvear.
Según denuncian periodistas sureños, desde las habituales fuentes de información de la policía se habría ocultado toda información del hecho –público y notorio- con la insólita excusa de que no se mandó reporte porque «ese día hubo muchos accidentes en la provincia» y que ese «era un accidente más».
Pero, según se fue sabiendo en redes sociales, con el correr de las horas y los días, lo cierto es que estuvieron involucrados en el hecho algunos “hijos del poder”. Entre ellos el hijo del jefe de la Policía de Mendoza Marcelo Calipo, quien era uno de los ocupantes de un Fiat 500 en donde viajaban otros cuatro jóvenes.
Al momento de la llegada de la Policía sólo quedaron en el lugar el conductor del auto y un menor, que resultó seriamente herido y fue retirado en ambulancia, aunque luego el Hospital Enfermeros Argentinos también omitió dar detalles a la prensa alvearense.
Aunque se trataba de un accidente de gravedad de importancia noticiosa, los medios se enfrentaron a un «cepo informativo», aunque finalmente lograron establecer que el accidente fue protagonizado por una camioneta Volkswagen Saveiro, conducida por Jonathan Sosa, de 39 años, un pequeño constructor que al momento del choque iba a trabajar a una obra; y un Fiat 500 conducido por un joven de apellido Vaira, hijo del propietario de una conocida concesionaria de autos. En este vehículo, además, viajaban un menor de apellido Serro, de 17 años, hijo de un comerciante de Alvear, un joven de apellido Vázquez, hijo de Claudio Vázquez, dirigente del PJ alvearense y de la diputada provincial Roxana Escudero, y una chica de quien no trascendieron mayores datos; además del hijo de Calipo.
En principio, y aunque la policía alvearense no quiso brindar la información, habría existido alcoholemia positiva tras los testeos de rigor.
Datos de InfoYa, lavoz.alvear, y Radio 1