En un claro desafío a la conducción nacional de Cristina Fernández, Axel Kicillof lanzó su propio espacio político dentro del peronismo, con el objetivo de “hacer frente a las políticas del Gobierno nacional”.
“El peronismo enfrenta un desafío histórico: reconstruirse para liderar una alternativa al experimento de ajuste y crueldad que lleva adelante el Gobierno nacional de Javier Milei”, expresa el documento lanzado en redes sociales, que tuvo la adhesión de más de 40 intendentes, legisladores nacionales y provinciales, organizaciones sociales, políticas y obreras, entre otras.
El texto dice que “es momento de actualizar nuestras ideas con una perspectiva de futuro” subrayando que sea “sin temor al debate interno”, como así también “escuchar, comprender las razones de nuestra derrota a nivel nacional y recuperar la agenda de las mayorías”.
En este marco, el diputado nacional Martín Aveiro se encolumnó detrás de Axel Kicillof para «reconstruir al peronismo» despertando no pocas sorpresas, si se considera que en octubre pasado; cuando la ex vicepresidenta lanzó su línea para ir por la presidencia del partido, el ex intendente de Tunuyán integró sus listas.
Así, Aveiro adelantó que militará dentro de esa línea del peronismo en la provincia.
También están enrolados en el flamante movimiento político numerosas organizaciones sociales y políticas como La Patria es el Otro, Patria y Futuro, Kolina Buenos Aires, Corriente Néstor Kirchner, Somos Barrios de Pie y Corriente Nacional de la Militancia, entre otras. Las centrales obreras también se sumaron: tanto la CGT como la CTA Autónoma y la CTA de los Trabajadores, la Federación de Camioneros y la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) encabezan el listado que lleva más de 400 adherentes.
Obviamente, la presentación en sociedad del nuevo armado cayó pésimo en el Instituto Patria. En el entorno de CFK aseguraron que la jugada de Kicillof «técnicamente dividió al peronismo».