La justicia liberó al imputado que causó la muerte de una joven de 25 años, y heridas gravísimas a otras dos personas.
Aldo Javier Soto, fue imputado por causar dos accidentes con pocos minutos de diferencia entre uno y otro que causaron la muerte de una joven y heridas gravísimas a otras dos personas; al conducir en contramano y bajo los efectos del alcohol.
Sin embargo, la justicia ordenó que recuperara la libertad luego del pago de una fianza de un millón de pesos.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo en el departamento de Las Heras, cuando, conduciendo en contramano y alcoholizado, embistió primero a una moto en que viajaban Luciana Monardez, de 25 años, quien falleciera posteriormente; y su amigo Franco Flores, que resultó con heridas muy graves. Posteriormente, a escasos metros embistió también otra moto conducida por Pablo Gutiérrez, de 34 años, que regresaba de su trabajo y resultara con heridas de suma gravedad.
Soto, que conducía el auto que embistió a las tres víctimas es oriundo de Maipú y tiene 33 años. Luego de ser detenido por policías, le realizaron un test de alcoholemia, cuyo resultado fue considerado “excesivo” para estar al frente del volante: presentaba 2,28 gramos de alcohol por litro de sangre al momento de practicarle el análisis, casi cinco veces más de lo permitido por ley para manejar.
El mismo día del hecho quedó a disposición de la Justicia, pero sólo permaneció cuatro jornadas en una celda luego de ser imputado por una calificación excarcelable que prevé de 3 a 6 años de cárcel.
Este jueves por la mañana, pagó una fianza de un millón de pesos y recuperó la libertad sometido a proceso.
