El escándalo trepó al punto en que el presidente de la Cámara de Diputados Martín Menem, quien había ingresado ya empezada la reunión, llamó a la seguridad.
El alboroto fue de tal magnitud que, según Yamil Castro Bianchi -abogado de Arrieta– la diputada mendocina «estalló en llanto» y terminó haciendo una denuncia por violencia de género por haber vivido presuntas situaciones de violencia y hostigamiento a través de gritos y amenazas».
Castro Bianchi también relató que debió intervenir la Policía y contó que «a Lourdes la atendió un médico» y que «fue un desborde de violencia total».
El motivo no fue la derrota que le había propinado la oposición al rechazar el decreto presidencial sobre gastos reservados, sino más bien discutir la actitud de la diputada Lourdes Arrieta por haber salpicado a Martín Menem, en la visita a represores de la última dictadura que protagonizaron seis legisladores libertarios.
La escena del escándalo tuvo lugar en el salón Blanco de la Cámara de Diputados, donde el bloque de la Libertad Avanza, que conduce Gabriel Bornoroni, suele celebrar sus reuniones. Ni bien comenzó la reunión, llovieron los reproches sobre Arrieta: arrancó el diputado Beltrán Benedit –el organizador de la visita- y luego su par Nicolás Mayoraz. Le cuestionaron por sus declaraciones de ayer en la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento: allí la mendocina sostuvo que Menem debería dar explicaciones sobre esa visita.
Arrieta reaccionó indignada y a los gritos ante lo cual Menem, quien había ingresado ya empezada la reunión, llamó a la seguridad.
La mendocina Arrieta se retiró visiblemente alterada; según contaron testigos de la reunión, se habría dirigido acompañada por su abogado, Yamil Castro Bianchi, a la comisaría policial apostada en la Cámara. La reunión de los libertarios continuó sin su presencia. Algunos dejaron trascender que pedirían su expulsión del bloque.
“Estaba desquiciada. Lo que nos molesta realmente es que haya mentido sobre Martín Menem, no sabía nada sobre la visita a Ezeiza. Tenemos la sospecha de que detrás de Arrieta está el kirchnerismo, que busca dividir a nuestro bloque”, contó una legisladora. Es que en la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamentos, Arrieta sugirió que Menem sabía de la visita al penal de Ezeiza.
Desde la presidencia de la Cámara negaron que, durante la reunión de bloque, se la hubiese maltratado a Arrieta. “Menem participó de la reunión de bloque para escuchar lo que tenían que decir los legisladores. Arrieta nos sorprendió con su declaración en la comisión, fueron todas mentiras”, indicaron