
Se trata de el «Oso» y el «Kaká».
El pasado viernes, la Policía de Mendoza, a través del Departamento de Lucha contra el Narcotráfico Valle de Uco, concretó tres allanamientos simultáneos en viviendas ubicadas en Eugenio Bustos, San Carlos, que culminaron en la detención de dos hombres con frondoso prontuario y el secuestro de marihuana, dinero en efectivo y otros elementos vinculados a la venta de estupefacientes.
Estos procedimientos contaron con la intervención de la Unidad Fiscal Federal Mendoza. Como resultado, fueron detenidos un hombre de 31 años, apodado El Kaká, y otro de 35 años, conocido como Oso. El primero posee 42 causas judiciales previas, mientras que el segundo registra 32 antecedentes, entre ellos, delitos contra la propiedad, contra las personas y por infracción a la Ley Nacional de Estupefacientes 23737.
Sin embargo, a los pocos días de su detención los dos hombres ya recuperaron la libertad. Es que, Javier Alejandro Martínez Barroso, un jornalero de 32 años apodado “Kaká”, y Jonathan David Nievas Díaz, conocido como Oso”, de 35 y también peón rural, fueron capturados el viernes a las 17.30 por venta de drogas en tres allanamientos. Pero, este lunes luego de una audiencia de formalización de la acusación en los Tribunales Federales de Ciudad volvieron a sus hogares. Y hasta sus familiares festejaron su corta estadía tras las rejas cuando subieron imágenes a sus perfiles de redes.
Ambos estaban en la mira de la PCN desde hacía tiempo. El Ministerio de Seguridad había informado con éxito que ambos sumaban “70 causas” por delitos variados, principalmente vinculados al narcomenudeo. Pero los pesquisas judiciales no lograron mantenerlos en situación de encierro porque las pruebas en su contra, estimaron, no fueron suficientes para enviarlos a la cárcel y están en las calles nuevamente.