Un sismo de magnitud 7,8 sacudió el sur de Turquía y el norte Siria, causando cientos de muertos y miles de heridos así como importantes daños, según los primeros balances.
En Turquía más de 284 personas murieron y 2.320 resultaron heridas, según reprodujo la agencia de noticias AFP, más de mil edificios se derrumbaron totalmente, por lo que lamentablemente los datos pueden ir en aumento minuto a minuto, tras las tareas de rescate.
Además, en Siria al menos 560 personas murieron. La agencia oficial de noticias SANA, citando al Ministerio de Sanidad, dijo que al menos 339 personas murieron y 1.089 resultaron heridas en las zonas controladas por el gobierno del país devastado por la guerra. Por su parte, el grupo de rescate Cascos Blancos dijo que al menos 221 personas murieron y 419 resultaron heridas en las zonas bajo control de otros grupos.
El temblor se sintió a las 4.17 (23.13 hora argentina) y se produjo a una profundidad de 17,9 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). Debido a la hora en que ocurrió el sismo, de madrugada, la mayoría de la gente estaba durmiendo en sus casas.
”Mi hermana y sus tres hijos están bajo los escombros. También su marido, su suegro y su suegra. Siete miembros de nuestra familia están bajo los escombros”, explicó a la AFP Muhittin Orakci, mientras presenciaba las operaciones de rescate delante de un edificio en ruinas en Diyarbakir.
”Su hermana sigue bajo los escombros”, dijo una mujer señalando a otra víctima desconsolada en la misma localidad.
Por seguridad, se cortó el gas en toda la zona, por las réplicas y por temores a que se produjeran explosiones.
Este sismo es el más importante en Turquía desde el terremoto del 17 de agosto de 1999, que causó 17.000 muertos, un millar de ellos en Estambul.