Luego de tomarse una semana de gracia para oficializar la decisión que anunció ni bien el Senado sancionó el nuevo sistema previsional, que implicaba una mejora en los haberes para jubilados, Javier Milei concretará su primer veto a una ley desde que asumió como Presidente. El Gobierno observa la reacción del Congreso.
En ese marco, Javier Milei sostuvo un encuentro en la tarde del viernes en Casa Rosada con aliados del PRO y del MID, con vistas a evitar que la oposición consiga los dos tercios en Diputados, necesarios para revertir su veto. Si se contempla el acompañamiento de los bloques de Carolina Píparo y Lourdes Arrieta junto a otros bloques que nunca votaron distinto al Gobierno, el oficialismo cuenta con 86 votos: considerando la composición de 256 de la Cámara baja, esa cuenta evitaría que el abanico opositor alcance los 172 apoyos que representan dos tercios.
El Congreso aprobó la semana pasada una nueva fórmula previsional que otorga a los jubilados una compensación extra de 7,2%, debido a que con el actual esquema, que rige por DNU de Milei desde abril, se incorporó un aumento del 12,5% que no llegaba a cubrir el salto inflacionario de enero, que fue del 20,6%. Además garantiza la transferencia de fondos previsionales adeudados del Gobierno nacional a las provincias.
Milei aseguró que la nueva fórmula genera una suba de deuda de 62 puntos respecto del PBI. “Tomaron una medida que le cuesta a los argentinos u$s370.000 millones y eso les arruina la vida a nuestros hijos, nietos y a varias generaciones futuras”, enfatizó el mandatario en la Bolsa de Comercio de Rosario. Esta estimación, según afirmó el presidente en una entrevista televisiva, es “a perpetuidad”.
Sin embargo, especialistas en el tema disienten con la mirada oficial. Incluso, el ex titular de la Agencia Nacional de Seguridad Social (ANSES) y actual presidente del IERAL, Osvaldo Giordano, subrayó que “la nueva fórmula de movilidad es una oportunidad de darle mayor sostenibilidad al equilibrio fiscal”.