Como propósito pedagógico y busca concienciar a las familias sobre la presencialidad en el nivel, entre otros valores.
El gobierno escolar, a través del Proyecto Asistencia y Presencialidad impulsado por la Dirección de Educación inicial, busca garantizar que la asistencia escolar sea valorada como un componente fundamental del proceso educativo. La asistencia regular, sostenida y relevante es un factor clave en la trayectoria educativa de los estudiantes, y el ausentismo injustificado puede generar discontinuidades en los aprendizajes. La capacidad de expresarse oralmente, el desarrollo del vocabulario, la capacidad de comprensión y de adquisición de habilidades sociales de trascendencia como la experimentación y el juego son experiencias educativas que se enriquecen con una asistencia cotidiana y que reducen la inequidad en la educación.
Las inasistencias reiteradas a la escuela perjudican las oportunidades educativas de niños y niñas, sobre todo de sectores más desfavorecidos. Las instituciones de Nivel Inicial deben arbitrar todos los medios para que se cumplan los tiempos de aprendizaje, la obligatoriedad educativa, la asistencia regular a la escuela y los aprendizajes que en ella deben producirse, pero las familias deben acompañar este proceso para un óptimo aprendizaje de sus hijos.
Marcelo García, titular de Educación Inicial, enfatizó que, desde 2016, la dirección de línea busca resolver esta problemática de la falta de asistencia a los jardines, que ha venido creciendo. “Entendemos que, por un lado, hay una idea errónea en la sociedad de creer que los niños en el jardín solo van a jugar, y aunque en cierta medida es verdad, es cierto que, en lo lúdico, que es una dimensión importante en el desarrollo humano, atraviesan diferentes experiencias y aprendizajes, no solamente del espacio y del tiempo, de características, de clasificaciones y seriaciones, sino también todo lo que hace a la alfabetización, ya que se necesita de otros para poder hablar”, expresó García.
“Además, hay un aprendizaje de uno mismo, de sentirse capaz, reconocido, y esto se construye en un entorno que está consciente de él. Para nosotros es una etapa imprescindible, y el hecho de que los chicos estén en el jardín permite garantizar el derecho a educarse. Las familias deben cumplir con esa corresponsabilidad que tienen en la educación junto con el jardín. Lo importante es que no solamente nosotros pretendemos que estén en el jardín, sino que tengan experiencias potentes, que haya aprendizajes que los marquen de manera positiva y grata para toda la vida”, señaló el director del Nivel Inicial.
Es importante destacar que la ausencia al jardín genera una disminución importante en las oportunidades de aprendizaje, en la continuidad de los procesos, de sociabilización y pone en desventaja a los chicos, sobre todo en aquellos ámbitos de mayor vulnerabilidad. Las investigaciones realizadas en los últimos años visualizan cómo cuando el chico ha asistido a una sala de 4 y de 5 que ha dejado huella, por lo general ha colaborado de manera exitosa en la trayectoria de los otros niveles de obligatoriedad.