Hoy dábamos cuenta de un temblor que se registró en el Valle de Uco (nota), pero no nos habíamos percatado que más temprano todavía, a la 01:04 de la madrugada, también se había registrado otro movimiento en la provincia.
Concretamente, el sismo se produjo a una profundidad de 211 kilómetros, clasificándose como un terremoto de profundidad intermedia, a tan solo 31 kilómetros al Sur de Malargüe.
Claramente causó preocupación entre los malargüinos que lo percibieron, porque según explicaron los especialistas, este tipo de movimientos sísmicos, aunque potentes; suelen causar menos daños en la superficie debido a la mayor distancia que las ondas sísmicas deben recorrer desde el epicentro hasta la superficie terrestre, aunque “se sienten” por la población, con toda claridad.
El temblor malargüino se percibió en hogares y lugares de trabajo, especialmente en las zonas de Mendoza, Neuquén y Malargüe. Las vibraciones fueron lo suficientemente fuertes como para despertar a residentes y provocar ventanas y objetos móviles a moverse dentro de las edificaciones