El presidente Javier Milei celebró que la Argentina asuma la presidencia Pro Tempore del Mercosur con una particular broma, luego de que su par saliente de Uruguay,Luis Lacalle Pou,le hiciera entrega del martillo protocolar de las sesiones del bloque: “Todo lo que sea para romper, me encanta”, se jactó el libertario.
Durante su breve discurso, y tras haber participado de la apertura de la LXV Cumbre del Mercosur que se celebra en Montevideo, el mandatario insistió en su propuesta para promover el libre comercio sin restricciones, ante los jefes de Estado de países miembros, y rechazó la posibilidad de irse del bloque regional.
Planteó que el Mercosur “no puede tener reglas y determinaciones estáticas” y que «si sus normas son perniciosas tiene que ser posible cambiarlas en función de lo que necesitan los usuarios del instrumento, los países firmantes. Este instrumento debe ser blando y maleable, de lo contrario su propia rigidez lo termina quebrando”, reiteró.
Milei también destacó que su presidencia al frente del Mercosur estará caracterizada por recuperar el espíritu crítico del bloque que, según expuso, «tal como funciona hoy, trae más problemas que soluciones».
Pese a sus críticas, echó por tierra las chances de romper con el bloque, aunque deslizó la posibilidad de “disolución” de mantenerse el funcionamiento actual del bloque. “Tenemos dos caminos: o aceptamos que el Mercosur no funciona y lo disolvemos, lo cual no es la voluntad del gobierno argentino, o lo adaptamos para que sea funcional a las necesidades actuales de sus integrantes”, remarcó.