Ocurrió en Córdoba.
Un jubilado se roció con nafta y amenazó con prenderse fuego en la sede del Pami de Córdoba, en protesta por su medicación. Ocurrió ayer, cuando las oficinas estaban repletas de personas reclamando la misma situación.
De acuerdo lo trascendido, el hombre de unos 70 años tiene cáncer y era la tercera vez que acudía a realizar el trámite por los remedios que necesita por su enfermedad.
“Un compañero del área de Atención al público logró contenerlo en una primera instancia”, explicó el delegado de la sede y siguió: “Logró sacarle el encendedor ante una situación de mucha ansiedad que estaba sufriendo”. Incluso, aseguró que tuvo una “contención automática”.
El jubilado ingirió una parte del combustible al rociarse su cuerpo y debió ser trasladado a un hospital de Córdoba.
Allí lo atendieron y además fue contenido por un gabinete psicológico. El delegado lamentó la situación y remarcó que podría haber sido una tragedia debido a que ocurrió con la oficina repleta de afiliados y trabajadores.