El Banco Nación avanza con su plan de «desvinculación por mutuo acuerdo», una estrategia de jubilación anticipada que ha generado debate y preocupación en el ámbito bancario.
El régimen de retiro voluntario, que se estableció a finales de 2024, experimentó modificaciones recientes. Inicialmente, la oferta estaba dirigida a mujeres de 57 años y hombres de 63, pero desde enero de 2025 se amplió a trabajadoras de 55 y trabajadores de 60, con el objetivo de atraer a más empleados antes del cierre del programa, previsto para marzo.
La propuesta consiste en un pago equivalente al 80% del salario actual, que parte de un básico superior a $1,5 millón, sin contar antigüedad ni otros ítems adicionales.
Desde la Asociación Bancaria, el sindicato que nuclea a los trabajadores del sector, han manifestado su oposición a esta medida. El gremio sostiene que el retiro anticipado no es una novedad y que experiencias previas demostraron su impacto negativo, tanto para los empleados que aceptaron la oferta como para la entidad misma.
A nivel nacional, se menciona que el Gobierno enviará al Congreso la reforma de la Carta Orgánica. Es el primer paso para abrir la estructura del paquete accionario y permitir incorporar a algún socio capitalista por primera vez en 134 años de historia desde su fundación.
El debate sobre el futuro de la entidad sigue abierto. Mientras tanto, la medida sigue en marcha y habrá que esperar hasta marzo para conocer su impacto definitivo en Mendoza y el resto del país.